domingo, 23 de enero de 2011

Día 4

Hace varios días que no escribo nada por estos lares pero es que la verdad es que no hay nada que decir, o por lo menos no hay nada bueno que decir, y mi abuela me dijo una vez que si no tenía nada bueno que decir es mejor que no hablara porque luego empieza la gente a decir que si eres un facha, que si eres un racista, que si patapín patatán. Yo sigo la máxima de Don Vito Corleone (el del Padrino por si hay algún despistado): “Que nadie sepa lo que piensas”.
Es que hay gente que piensa que solo por no pensar como él, ya eres lo más extremista del planeta, pero cuando realmente observas a esa gente te das cuenta de que no tienen ni puta idea de lo que hablan, en serio, ¿os escucháis?, no, en serio, ¿os creéis lo que decís? No os dais cuenta que las cosas no son blancas o negras, hay tonalidades y los que llamais extremistas a los demás porque no os mirais en un espejo, quizás el extremista seas tú. Esto es un país libre y se puede decir lo que quieras (mientras no coartes la libertad de un tercero) y solo por lo que una persona diga o escriba lo que piensa no se sabe nada de ella, así que si oyes a alguien que se mete con quien sea, primero piensa cuales son sus razones, no le ahorques antes del juicio.


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